Valdés ante la Asamblea Legislativa
El gobernador Valdés, en un pasaje se su discurso, acentúo su postura respecto de la definición del perfil productivo de la provincia, asumiendo que los competidores de antes, como lo eran las provincias vecinas, ya no lo son en este mundo globalizado, y que por el contrario propone acentuar el vínculo y desarrollar estrategias comunes con estas. A la par asume que hay sectores a los que hay que potenciar, incluyendo al turismo como una herramienta productiva y de generación de recursos y generador de oportunidades para los correntinos. En este tramo el mandatario, hizo un extenso repaso de la situación de infraestructura en distintos aspectos, ya sea energética, vial, portuaria y de transporte.
“Es muy importante que intentemos definir un perfil productivo para nuestra provincia. Nuestros competidores ya no son nuestros vecinos: Chaco, Formosa, Misiones o Entre Ríos. Tampoco los países limítrofes: Brasil, Paraguay o Uruguay. Con ellos tenemos que afianzar los vínculos y generar alianzas estratégicas.
Vivimos en un mundo globalizado y competimos por los mercados y los inversores, con todo el mundo. Eso nos obliga a ser creativos, dinámicos, flexibles, inteligentes e innovadores. A ofrecer mejores condiciones que los demás. A garantizar seguridad jurídica. A manejar niveles de impuestos razonables.
Hay sectores que tenemos que potenciar. Están cantados, porque en ellos ya somos muy buenos o tenemos ventajas competitivas:
La industria de la madera. Tenemos la mayor área forestada del país y debemos darle valor agregado. Tenemos que industrializar nuestra materia prima e incorporarle diseño: hacer placas, muebles e incluso pasta celulosa. No tengamos miedo de decirlo. La hacen en Misiones, Uruguay y Brasil, y tenemos que hacerlo nosotros también y no limitarnos solamente a venderles la madera para que sean ellos quienes la industrialicen.
Y debemos hacerlo con los estándares de seguridad ambiental más avanzados del mundo, como se hace en Europa. Porque si no lo hacemos nosotros, otros lo van a hacer, arrebatándonos los empleos que necesita nuestra gente.
La ganadería. Tenemos el tercer stock ganadero del país. Mejoramos enormemente la genética de nuestros rodeos, que hoy es valorada internacionalmente. Somos eficientes en el primer eslabón de la cadena productiva, pero vendemos terneros para que otros los engorden. Tenemos que integrar la cadena hacia arriba. Tenemos que hacer engorde y desarrollar frigoríficos capaces de exportar. Tenemos que ser, por ejemplo, pioneros en la apertura del mercado chino.
Tampoco le estamos sacando todo el provecho posible a nuestros corderos. Tenemos que darle prestigio al Cordero Correntino.
El arroz. Somos el primer productor nacional. Hemos ampliado el área sembrada, avanzamos en la provisión de energía para regar y en el procesamiento de los granos. Antes teníamos que procesar en otras provincias y hoy podemos absorber toda nuestra producción localmente. Pero debemos mejorar la logística, bajar sus costos, para ser más competitivos.
Los cítricos; la horticultura realizada bajo cobertura; la yerba mate; el té; y la miel. En todos esos sectores lo hacemos bien, pero tenemos mucho para seguir creciendo y mejorando.
Pero hay otra industria en la que venimos creciendo a pasos agigantados y es en la industria del Turismo. Tenemos los ríos, los festivales, el carnaval, el turismo religioso que mueve multitudes. Y tenemos esa joya que son los Esteros del Iberá.
Y ese es un tema en el que venimos trabajando con inteligencia. Un modelo del que podemos sentirnos orgullosos.
Durante años confrontamos dos visiones: la del sector privado y la del sector público. Pero ahora estamos trabajando en forma mancomunada: los privados, las ONGs, la provincia y los municipios de la zona. Y tenemos un Plan Estratégico para el desarrollo del Iberá, que ya está dando muy buenos resultados.
Juntos logramos crear el Parque Ecológico más grande del país, estamos reintroduciendo especies en peligro de extinción, creando infraestructura para el turismo, financiando a tasas subsidiadas los emprendimientos de hotelería y turismo receptivo. Ahí tenemos un modelo para clonar.
Hoy en Corrientes nos visitan miles y miles de turistas al año, algunos hacen turismo interno, otros vienen de todo el mundo, es una gran fuente de empleo y le queda mucho potencial.
En el mismo sentido, la ampliación y diversificación del mercado turístico, impone una expansión del Aeropuerto Piragine Niveyro. Actualmente contamos con dos vuelos diarios a Buenos Aires y desde marzo se sumará una Low Cost, lo que duplicará la cantidad de pasajeros, y los vuelos internacionales como el que une Asunción – Corrientes.
En el interior avanzaremos sobre la creación y optimización de aeroclubes que permitan un movimiento aéreo fluido entre Corrientes y localidades como Carlos Pellegrini. Y mediante convenios con la Administración Nacional de Aviación Civil procurararemos el traspaso a la jurisdicción provincial de los aeropuertos de Paso de los Libres y Monte Caseros y la habilitación de los de Ituzaingó, La Cruz y Yapeyú.
Pero los aeropuertos no tienen que ver solamente con el turismo. En materia humanitaria, en 2017 se hicieron 97 vuelos sanitarios (promedio de 8 mensuales) y lo seguiremos haciendo para los correntinos que lo necesiten.
El Conocimiento. Otra de las cosas que tenemos para ofrecer es conocimiento, inteligencia. Junto con nuestros hermanos del Chaco, compartimos la UNNE. Ahí hay talento y conocimiento. Tenemos que ponerlos en valor, porque ese talento y ese conocimiento, son un capital de todos. Ahí, hay potencialidad.
Energías renovables. En Corrientes se produce energía limpia. Tenemos Yacyretá y Salto Grande. Tenemos que hacer de una vez por todas Garabí. Debemos producir energía solar y explotar los derivados de la madera.
Recién mencioné Yacyretá y Salto Grande. En ese sentido tengo una posición tomada, firme e irrevocable: Corrientes merece una reparación histórica en materia energética y la estamos reclamando.
Tenemos derecho a exigir las obras que no se hicieron durante décadas. Porque sí se hicieron en Misiones y se discriminó a Corrientes.
Pero ese no es el único derecho que no nos reconocieron. Así como las provincias petroleras cobran regalías por su petróleo, los correntinos tenemos derecho a recibir regalías justas por nuestros recursos naturales que nos han sido negadas por 20 años.
La propiedad de los recursos naturales nos ha sido reconocida por la Constitución del ‘94. Podemos discutir cuánto, cómo y cuándo, pero no vamos a deponer nuestra demanda porque es justa y razonable.
Y vamos a defender con mucha fuerza nuestros derechos, porque yo les hablé de desarrollo, modernización e inclusión social, y para todo ello hacen falta recursos. Y de aquí podemos obtenerlos.
En materia energética, también vamos a avanzar con la Línea de 132 kilovoltios que une Saladas y Santa Rosa y la instalación de nuevas estaciones transformadoras en Santa Rosa, Mocoretá, Samiento, Pirayú, Goya Oeste, Itatí y Paso Tala.
Y seguimos avanzando con la red de Gas Natural, un viejo anhelo de los correntinos. Estamos iniciando la construcción de las redes de distribución interna de Curuzú Cuatiá y Mercedes y vamos a continuar con las de Monte Caseros y Paso de los Libres.”